¿Qué es?
El método comunicativo es una técnica de enseñanza de lenguas que enfatiza la interacción y la competencia comunicativa como las bases principales de estudio de un idioma. Con este método los estudiantes trabajan en parejas o grupos usando el idioma para resolver determinadas tareas.
El método comunicativo generalmente consta de dos partes implicadas en una interacción donde una parte expresa una intención y la otra reacciona. Puesto que los enfoques comunicativos son más una serie de estrategias que un método propiamente dicho se utilizan por muchos profesionales que lo interpretan e implementan en el aula de maneras distintas. Howatt (1984) distingue entre una versión “fuerte” y una “débil” del método comunicativo.
La versión “fuerte” sostiene que un idioma se adquiere mediante comunicación, mientras que la versión “débil” (convertida en práctica estándar hoy en día) enfatiza la importancia de usar el idioma para aprender dentro de un programa más amplio. En otras palabras, mientras que la versión “débil” significa “aprender a usar el idioma”, la versión “fuerte” implica “usar el idioma para aprenderlo.”
La teoría detrás de este enfoque es que “las actividades que implican comunicación favorecen el aprendizaje.” Por consiguiente, se seleccionan aquellas actividades que favorecen el aprendizaje del idioma de manera significativa.
Esto llevó a la creación de temarios comunicativos, que consisten en combinaciones de contenidos estructurales y funcionales tales como a) situaciones típicas en las que se utiliza el idioma (p. ej. viajar, negocios) b) temas sobre los que hablar (p. ej. educación, compras) c) las funciones que cumple el idioma (p. ej. describir algo, pedir información) d) vocabulario y gramática.
Un temario comunicativo © New English File
¿Qué actividades son características?
El tipo de actividades comunicativas es muy amplio, siempre y cuando conlleven comunicación, intercambio de información e interacción por parte del estudiante. Algunos ejemplos son: rellenar huecos, diálogos, entrevistas, debates o intercambios. Richards y Rodgers (2001) proponen tres tipos de materiales comunicativos:
- Textos. La mayoría de libros de texto actuales constan de un temario con contenido estructural y funcional que se lleva a cabo mediante unidades que contienen a) textos reales o adaptados con preguntas de comprensión b) actividades comunicativas para trabajo en pareja o en grupo c) explicaciones gramaticales con ejercicios (p. ej. rellenar huecos).
- Tareas. Estas pueden ser juegos, role plays, fichas, y en general material que favorezca la comunicación. Suelen venir en forma de paquete de actividades, cuadernos de ejercicios, o simplemente aparecen como apéndice al final del libro de texto.
- Material real. Que puede constar de revistas, periódicos, y otros elementos visuales sobre los que se puedan construir actividades comunicativas tales como mapas, imágenes, símbolos, gráficas, etc.
Texto y tareas comunicativas © New English File
Crítica
El método comunicativo en su versión más estricta resulta muy atractivo debido a la implicación de que aprender hablando significa “no aprender gramática.” Sin embargo, puesto que un idioma consta de gramática, intentar aprenderlo sin gramática es como intentar aprender matemáticas sin números.
Siempre que aprendes un idioma estás aprendiendo gramática, o bien de manera deductiva o bien inductiva. Pero aprender gramática de manera inductiva (p. ej. a través del contexto) no significa no aprenderla. De hecho, cuanto más inductivo el aprendizaje, más necesitas recurrir a tu pensamiento analítico. En otras palabras, cuanto menos entiendes más tienes que tratar de averiguar lo que significa.
Por esta razón la comunicación por sí misma no es “la clave” para aprender un idioma. Como Swan (1985) señaló “la gramática no se ha vuelto más fácil desde la revolución comunicativa.” Hay una diferencia entre aprender y practicar un idioma. Lanzar pelotas por encima de una red no significa que estás aprendiendo a jugar a tenis. Por esta razón es importante combinar la comunicación con otro tipo de actividades de carácter más explícito para lograr un aprendizaje escalonado.
Referencias
Howatt, A. P. R. (1984). A History of English Language Teaching. Oxford: Oxford University Press.
Richards, J., & Rodgers, T. (2001). Approaches and Methods in Language Teaching. New York: Cambridge University Press.
Swan, M. (1985). A critical look at the Communicative Approach (2). English Language Teaching Journal, 39(2), 76–87.